La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) declaró emergencia nacional este martes, alertando que la escasez de combustible paraliza el transporte y pone en riesgo la producción de alimentos en Bolivia.
Producción en riesgo
El presidente de la CAO, Klaus Frerking, señaló que el 90% del transporte de insumos y productos agrícolas está detenido. Esta situación afecta la cosecha de invierno y amenaza la campaña de verano, en la que se planea sembrar más de 3 millones de hectáreas en todo el país, principalmente soya en Santa Cruz.
Impacto en el precio de los alimentos
La falta de combustible retrasa la siembra, frena la producción azucarera y reduce la producción lechera, lo que ya se refleja en el incremento de precios de la canasta familiar en varias regiones.
Pedido urgente
El sector agropecuario llamó al Gobierno y a los candidatos presidenciales a dar soluciones inmediatas. “Los ciclos agrícolas no esperan, necesitamos combustible ahora”, advirtió Frerking.
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