Millones de personas se ven afectadas por intensas precipitaciones que han provocado inundaciones, cierres masivos de carreteras, suspensión de trenes y alerta en zonas costeras.
Tormentas torrenciales paralizan transporte, provocan evacuaciones y afectan a millones en el noreste de EE.UU.
Una tormenta histórica azotó este jueves a Nueva York y gran parte del noreste de Estados Unidos, dejando lluvias de hasta 127 milímetros en pocas horas. Las precipitaciones provocaron inundaciones repentinas, cortes de autopistas, demoras en aeropuertos y serias interrupciones en el sistema de metro y trenes.
Ante la magnitud del evento, la gobernadora Kathy Hochul declaró el estado de emergencia tanto en Nueva York como en Nueva Jersey. La alerta se extiende al menos hasta la mañana del viernes, con más lluvias esperadas.
Transporte colapsado y escenas de caos
Uno de los casos más críticos ocurrió en el tren de Long Island (LIRR), donde un convoy quedó detenido por horas cerca de Queens. Los bomberos evacuaron a los pasajeros con escaleras. En el metro, videos muestran estaciones inundadas como Jay Street-MetroTech, Grand Central y Park Slope, afectando varias líneas en plena hora pico.
En superficie, autopistas como la Clearview Expressway, la Long Island Expressway y la Staten Island Expressway quedaron anegadas. Vehículos atrapados, autobuses con agua dentro y calles intransitables marcaron una jornada caótica.
Aeropuertos y trenes interurbanos también colapsaron
Los tres aeropuertos del área metropolitana —JFK, LaGuardia y Newark— registraron demoras de hasta tres horas. Más de 1.100 vuelos fueron cancelados, mientras Amtrak suspendió temporalmente servicios entre Filadelfia y Wilmington.
Llamado a la precaución
Las autoridades piden a la población no desplazarse si no es necesario. Aunque las tormentas comenzaban a amainar al final del jueves, los daños se acumulaban. La ciudad permanece bajo vigilancia por inundaciones, con nuevos llamados a monitorear alertas oficiales.