El presidente Rodrigo Paz visitó este miércoles las instalaciones de la Empresa Nacional de Electricidad en Cochabamba, donde anunció la necesidad de reestructurar la estatal energética, advirtiendo que gran parte de la generación depende del gas, un recurso que podría agotarse para 2028.
Dependencia del gas y urgencia de cambios
Durante su visita a ENDE, el presidente Rodrigo Paz expresó su preocupación por la alta dependencia del gas para la generación eléctrica, señalando que siete de cada diez focos en el país funcionan con este recurso. Advirtió que, según la información técnica recibida, el gas tendría disponibilidad solo hasta 2028, lo que exige una transformación estructural en el sector energético.
“ENDE debe servir al pueblo”
Paz aseguró que la reestructuración de ENDE es inevitable para garantizar un servicio eficiente y transparente. Enfatizó que la empresa debe responder al interés nacional y no a partidos políticos o gobiernos, destacando que la meritocracia será un pilar fundamental para fortalecer tanto a ENDE Central como a sus diez filiales.
Modernización normativa pendiente
El mandatario lamentó que el sector continúe regido por la Ley 1604, promulgada durante el primer gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada y posteriormente “parchada”. Señaló que es imprescindible elaborar una nueva normativa que permita dinamizar, modernizar y hacer viable a la empresa estatal, facilitando inversiones y otorgando seguridad jurídica a potenciales socios nacionales.
Fortalecer la competitividad energética
Actualmente, ENDE genera el 85% de la energía eléctrica del país, una posición que, según Paz, debería convertirla en una empresa altamente exitosa. Sin embargo, insistió en que se requieren instrumentos legales y administrativos para hacerla más dinámica y competitiva, especialmente ante la necesidad de diversificar fuentes de generación.
Descentralización de los ingresos
El presidente también anunció su intención de redistribuir los ingresos generados por ENDE hacia municipios y gobernaciones, con el objetivo de fortalecer servicios esenciales como salud y educación. Señaló que su gobierno busca “acabar con el Estado centralista” y dar señales claras de apoyo a las regiones mediante una mayor descentralización económica.










