El 12 de agosto rinde homenaje a este formato que ha sobrevivido a cassettes, CDs y streaming.
Un formato con más de un siglo de historia
Los discos de vinilo siguen presentes en las colecciones musicales de millones de personas en el mundo. Este 12 de agosto se celebra el Día Mundial del Vinilo, una fecha para recordar el sonido único y la experiencia de escuchar un álbum completo en tocadiscos.
Su producción comenzó a finales del siglo XIX, desplazando a los discos de cilindro gracias a su precio, facilidad de uso y almacenamiento. En la década de 1940 aparecieron nuevos formatos como el sencillo de 45 RPM y el LP de 33 RPM, y en los años 50 se incorporó el sonido estereofónico.
El arte y el ritual de escuchar música
Durante décadas, el vinilo marcó el ritmo de una época en la que las portadas eran casi tan importantes como la música que contenían. Diseñadores y artistas competían por crear carátulas icónicas, mientras los oyentes disfrutaban del ritual de escuchar cada cara del disco sin interrupciones.
Declive y renacer
En los años 80, la llegada del CD y más tarde el audio digital redujo drásticamente su producción. Sin embargo, el nuevo siglo trajo un resurgimiento impulsado por coleccionistas y jóvenes que buscan un sonido diferente al de las plataformas de streaming.
Hoy es común encontrar reediciones y lanzamientos en vinilo tanto en tiendas físicas como en línea. En Bolivia, bandas como Octavia, Track y Llegas han apostado por este formato en sus producciones.
Una experiencia que va más allá del audio
Más que un soporte musical, el vinilo es una experiencia: el peso del disco, el arte de su tapa y la calidez de su sonido al girar en el tocadiscos siguen conquistando a generaciones enteras.
/ A.T.C /
Deja una respuesta